La delegada del Gobierno en el País Vasco, Marisol Garmendia, ha establecido como uno de sus principales objetivos "normalizar la presencia y trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado" en Euskadi.

BILBAO, 3 May.

En una entrevista en Radio Euskadi, Garmendia ha reiterado la voluntad del Gobierno español de seguir avanzando en el autogobierno y cumplir con los acuerdos alcanzados con el PNV.

La delegada ha elogiado los avances logrados por su predecesor, Denis Itxaso, en la apertura de la delegación tras épocas difíciles marcadas por el terrorismo, señalando que ahora la situación es diferente, con un clima de paz y normalización política en la región.

Garmendia ha destacado la importancia de que el Gobierno de España siga apoyando a las empresas, entidades y colectivos sociales en su crecimiento en empleo y bienestar, haciendo uso de los recursos disponibles.

En cuanto a la presencia de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, la delegada resaltó su papel en funciones como la lucha contra la trata de mujeres y el narcotráfico, trabajando en coordinación con la Ertzaintza y las Policías locales.

Además, Garmendia hizo hincapié en que su designación como la primera mujer delegada del Gobierno en el País Vasco refleja el compromiso del Gobierno español con la igualdad de género, aunque reconoció la persistencia de obstáculos como los "techos de cristal".

Por otro lado, subrayó el compromiso del Gobierno de España con el fortalecimiento del autogobierno vasco, recordando las transferencias realizadas bajo el mandato de Pedro Sánchez y anunciando nuevas transferencias en el futuro.

Garmendia expresó su interés en seguir avanzando en el reconocimiento nacional de Euskadi, señalando la importancia de seguir mejorando los servicios públicos y la calidad de vida de la población vasca.

En cuanto a la figura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la delegada lo describió como alguien con resiliencia y resistencia, enfrentándose a desafíos tanto políticos como personales.

En términos políticos, Garmendia criticó a la derecha y la ultraderecha por promover discursos de odio y división, haciendo un llamado a la tolerancia y al respeto por la pluralidad de la sociedad vasca.

En relación con la libertad de expresión, la delegada enfatizó la importancia de adaptarse a las nuevas realidades digitales, sin comprometer la verdad y evitando la difamación.

Por último, Garmendia defendió la ley de Memoria Democrática como una herramienta fundamental para reconocer el pasado y construir un futuro más inclusivo y justo, en contraposición a las políticas de amnesia propuestas por partidos como el PP y Vox.