24h País Vasco.

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El Gobierno vasco augura un crecimiento económico del 1,7% en 2023, superando ligeramente las expectativas, y mantiene un alza del 2,1% para 2024.

El Gobierno vasco augura un crecimiento económico del 1,7% en 2023, superando ligeramente las expectativas, y mantiene un alza del 2,1% para 2024.

El consejero Pedro Azpiazu prevé que la tasa de desempleo en 2023 sea del 7,7% y del 7,0% el próximo año.

En Bilbao, el 25 de septiembre, se ha anunciado que la economía vasca crecerá un 1,7% en 2023, una décima más de lo previsto anteriormente por el Gobierno Vasco. Además, se mantiene la previsión de crecimiento para 2024 en un 2,1%.

Estas cifras fueron anunciadas por el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, durante su discurso inaugural en una jornada sobre 'Innovación y Sostenibilidad en el centro del Crecimiento Económico' celebrada en Bilbao.

La revisión al alza en el crecimiento económico se debe principalmente a que el segundo trimestre de este año resultó más dinámico de lo esperado. Esta revisión se basó en los datos de las cuentas trimestrales de Eustat y en la actualización de las hipótesis del entorno económico.

En cuanto al empleo, Azpiazu señaló que será uno de los elementos clave para el crecimiento en los próximos años. Se espera la creación de alrededor de 13,000 empleos en 2023 y otros 16,000 en el próximo año. Como resultado, la tasa de desempleo se estima en un 7,7% en 2023 y un 7,0% en el próximo año.

Azpiazu reconoció que la predicción de crecimiento para 2024 puede sorprender, ya que otros organismos sitúan el pico de crecimiento en 2023 y luego se espera una desaceleración y posterior reactivación en 2025. Sin embargo, destacó que la tendencia económica se mantiene constante y lo que cambia es el calendario de los efectos de los fondos europeos, que se espera que impulsen la inversión en la segunda mitad de 2024.

En cuanto a la inflación, se espera una moderación en los próximos años, especialmente en 2024, año en el que se podría alcanzar una tasa de inflación cercana al 2,0%.

Desde el punto de vista de la demanda, se espera que el mercado interior (consumo e inversión) siga siendo fuerte, a pesar de un enfriamiento en el mercado exterior. Las familias mantendrán su consumo debido a la creación de empleo y a los aumentos de salario. Además, las empresas están aumentando sus plantillas, lo que indica confianza en una recuperación de los pedidos.

En términos de oferta, se espera que la producción industrial se reactive en los últimos meses de este año, mientras que la construcción mantendrá un crecimiento positivo y los servicios convergerán hacia la media de la economía después de los incrementos recientes.

A pesar de la desaceleración económica en Europa, Azpiazu destacó que la economía vasca se ha recuperado del nivel de PIB anterior a la pandemia y se encuentra dos puntos por encima de ese nivel.

A pesar de la ligera desaceleración en el segundo trimestre, el crecimiento económico vasco sigue siendo superior al de las economías europeas. La industria experimentó una ligera disminución en su valor añadido, mientras que la construcción sigue creciendo y los servicios mantienen tasas superiores a la media económica.

La economía vasca se ve afectada por la debilidad de los mercados de destino, la falta de nuevos pedidos, los altos costes de la energía y el aumento rápido de los tipos de interés. La reactivación esperada en China no ha sido tan intensa como se esperaba, lo que perjudica las exportaciones al país y afecta a las empresas vascas que tienen relaciones comerciales estrechas con Alemania.

En resumen, la economía vasca continúa creciendo a pesar de los desafíos económicos, y se espera que el empleo siga siendo uno de los pilares del crecimiento en los próximos años.