La inversión y las transferencias de capital en el año 2022 aumentaron en un 33,7%, llegando a los 2.439 millones de euros.

BILBAO, 21 Jun.

La deuda de las Administraciones Públicas Vascas cerró el año 2022 en 13.150 millones de euros, lo que representa un 15,2% del PIB, marcando una disminución con respecto al año anterior. Estos datos fueron recopilados por Eustat y abarcan al Gobierno Vasco, las Diputaciones Forales y las Administraciones Municipales, junto con sus respectivos Organismos Autónomos y Entidades supra e inframunicipales.

En el último año, se contrajeron nuevos pasivos por un total de 821,8 millones de euros, mientras que se amortizaron 1.108,9 millones. Destaca la reducción de 287 millones de euros en el importe pendiente de amortizar, lo que significó una disminución de 2 puntos porcentuales.

Del total de deuda pendiente de amortizar al cierre de 2022, el Gobierno Vasco representa el 78,7%, seguido por Bizkaia con el 12,3%, Álava con el 5% y Gipuzkoa con el 4% restante.

El Gobierno Vasco presentó un saldo presupuestario no financiero positivo de 275 millones. Todas las administraciones territoriales (Diputaciones Forales y Entidades Locales) registraron saldos positivos, siendo Bizkaia el territorio con un saldo de 390 millones, seguido por Gipuzkoa con 192 millones y Álava con 94 millones de saldo positivo.

En relación a las operaciones no financieras, tanto los ingresos como los gastos mostraron un incremento positivo con respecto a 2021. Los gastos aumentaron un 8,7%, mientras que los ingresos crecieron un 6,2%. Esto se reflejó en un Saldo Presupuestario No Financiero positivo de 952 millones de euros en 2022, comparado con los 1.344 millones de euros en 2021, según los datos de Eustat.

El aumento de los ingresos no financieros se debió a la evolución positiva de los ingresos corrientes (5,2%), que representaron el 93,5% del total de ingresos. Por otro lado, los ingresos por operaciones de capital registraron un significativo incremento del 43,4%.

En cuanto a las operaciones financieras, se observaron diferencias entre los ingresos y los gastos. Mientras que los ingresos financieros alcanzaron los 663 millones de euros, un 65,5% menos que el año anterior, los gastos financieros aumentaron un 16,4%, llegando a 1.567 millones de euros.

Los impuestos de las Administraciones Vascas, que representaron el 86,9% de los ingresos por operaciones corrientes en 2022, mostraron un comportamiento positivo en general, llegando a los 18.149 millones de euros, un 8,5% más que en 2021.

Los principales impuestos fueron el IVA (39,0%) y el IRPF (36,0%), con incrementos del 13,1% y 6,1% respectivamente con respecto al año anterior. Aunque el Impuesto de Sociedades experimentó el mayor aumento (16,6%), su peso en los ingresos es menor, con un 7,5%.

Hubo descensos en los impuestos especiales (-6,5%) y municipales (-0,9%). Los Otros Impuestos aumentaron un 14,8%. Los Otros ingresos corrientes, que incluyen tasas, transferencias e ingresos patrimoniales, representaron el 10,4% del total de ingresos y mostraron una caída del 16,6%.

En cuanto a los gastos, los gastos corrientes aumentaron un 6,0%, impulsados principalmente por las Transferencias corrientes y los Gastos de personal. Los Otros gastos corrientes también crecieron un 4,9%. En cuanto a las Inversiones y Transferencias de capital, hubo un aumento del 33,7% respecto al año anterior.