La UPV/EHU y Tecnalia ponen en marcha en Álava la primera bioimpresora tres dimensiones de Euskadi para la industria farmacéutica

Dejará conseguir estructuras tridimensionales de órganos y tejidos y formas farmacéuticas realizadas con tecnologías de fabricación aditiva
VITORIA, 17 Mar.
El conjunto de investigación NanoBioCel de la Universidad el País Vasco y el centro de investigación y avance tecnológico Tecnalia han puesto en marcha en el Campus de la UPV/EHU en Álava, con el acompañamiento económico de la Diputación alavesa, la primera bioimpresora tres dimensiones de Euskadi para la industria farmacéutica, que se inserta en un emprendimiento pionero, APD-Advance Pharma Development, que va a aceptar el desarrollo de terapias personalizadas en el ámbito pediátrico, en el envejecimiento saludable y en el campo de la medicina regenerativa e ingeniería de tejidos.
El diputado general de Álava, Ramiro González, la teniente diputado general de Álava y diputada foral de Desarrollo Económico y Equilibrio Territorial, Pilar García de Salazar, la vicerrectora del Campus de Álava, Manoli Igartua, y el director de Estrategia, Mercado y Tecnología de Tecnalia, Agustín Sáenz, han visitado este viernes las instalaciones y las nuevas tecnologías.
En su visita, han estado acompañados por los causantes operativos del emprendimiento, el doctor Jose Luis Pedraz, estudioso principal del grupo Nanobiocel de la Facultad de Farmacia de la Universidad del País Vasco, y la doctora Eider Larrarte, directiva de Pharma Labs en Tecnalia.
Según han explicado sus responsables, la primera bioimpresora 3D de altas posibilidades multifuncional de Euskadi creó ya sus primeros medicamentos y prototipos biológicos. Esta bioimpresora va a aceptar el desarrollo de terapias personalizadas, sobre todo en el ámbito pediátrico, en el envejecimiento saludable y en la medicina regenerativa e ingeniería de tejidos, para lograr ofrecer servicio a la industria farmacéutica y al sector sanitario.
La bioimpresora permitirá obtener construcciones tridimensionales de órganos y tejidos y formas farmacéuticas realizadas mediante tecnologías de fabricación aditiva. Gracias a la presencia de cabezales de impresión de extrusión, chorro de tinta y termofusión, la biompresora es capaz de fabricar estructuras tres dimensiones complejas, compuestas por cualquier combinación arbitraria de materiales biológicos y células.
Además, con la incorporación de técnicas de electrohilado y electroescritura, se ha adentrado en la regeneración de tejidos y la fabricación de biodispositivos sanitarios avanzados. A lo largo del presente año, a su vez se adquirirán nuevos elementos basados en tecnologías microfluidicas para agrandar el campo de app de la bioimpresora a la resolución de nuevos retos biomédicos.
Según han destacado los impulsores de este proyecto, la impresión tres dimensiones abre una vía a la medicina adaptada para ocasiones destacables y pequeños grupos de pacientes que no pueden ser tratados con las formas farmacéuticas tradicionales y comercializadas. Tal es la situacion de la población pediátrica, en la que se precisa una dosificación concreta dependiendo del peso y la nosología y que la impresión tres dimensiones puede solucionar.
Otro conjunto de interés, han apuntado, son los pacientes que deben ingerir distintas medicamentos de forma crónica y la impresión 3D puede unificar esas dosis en un único comprimido. En el ámbito de la ingeniería de tejidos y medicina regenerativa se trabaja en el diseño de cartílago, hueso, piel y tendón mediante distintos proyectos.
Durante este año y 2024, los investigadores se van a centrar en la etapa en fase de prueba y evolución del programa y también sabiduría de la máquina, con la meta de que hospitales y entidades de farmacia puedan contar con bioimpresoras para la fabricación de imprimidos y bioestructuras.
Este proyecto, han señalado los causantes del centro tecnológico,
responde a la apuesta de Tecnalia por ofrecer a la industria farmacéutica "un acompañamiento integral en la I D de medicamentos y construyendo tecnologías para los procesos de impresión 3D de fármacos en medicina adaptada".
En la situacion de la UPV/EHU, han correcto sus responsables, el avance de este proyecto permitirá incorporar nuevos investigadores al conjunto de investigación Nanobiocel a través de la idea Ikerbasque, tal como dotarse de infraestructuras científicas que le dejarán desarrollar proyectos biomédicos avanzados.
El grupo de investigación NanoBioCel de la Universidad del País Vasco, que también forma parte al Ciber BBN y a la infraestructura científico técnico singular Nanbiosis, y Tecnalia llevan paseo un camino en colaboración a lo largo de las tres últimas décadas que dio como fruto el proyecto BPL-Basque Pharma Labs 4.0, poniendo a Álava como referente en ese campo, ha señalado Tecnalia.
El acompañamiento de la Diputación Foral a ese proyecto propició la puesta en marcha en el año 2018 de nuevas instalaciones en el Parque Tecnológico de Álava, "las mucho más avanzadas a nivel estatal", y el crecimiento de un aparato, "enormemente cualificado", que pasó de 25 a 60 personas.
Ambos proyectos, APD y BPL, contribuyen a impulsar la generación de un Nodo Farmacéutico de "primer nivel" en el Territorio, y están ajustados tanto con el despliegue de la estrategia de especialización capaz RIS3 Euskadi como con la transición socio/sanitaria impulsada desde Europa, han remarcado desde el centro tecnológico.
Por eso, la Diputación Foral de Álava lo ha incluido entre los proyectos que impulsa en esta estrategia, concretamente en el apartado de la Biociencias, sumándose a los que apoya en el ámbito de la Fabricación Avanzada y la Energía.