Un nuevo cribado de preeclampsia ofrecido por Osakidetza permitirá a todas las mujeres embarazadas detectar a tiempo complicaciones relacionadas con la hipertensión arterial que afectan al funcionamiento de la placenta, influyendo en el desarrollo y crecimiento del bebé. Esta condición se presenta en aproximadamente el 2% de las embarazadas, causando graves alteraciones en la salud materna y fetal.

En la lucha por prevenir y disminuir los casos de preeclampsia, el Servicio Vasco de Salud ha anunciado la implementación de este nuevo programa que busca reducir en más de un 70% el desarrollo de esta complicación. Con la llegada del mes de junio, todas las mujeres embarazadas tendrán acceso a este cribado que busca preservar la salud de las futuras madres y sus bebés.

La preeclampsia representa una de las principales causas de complicaciones y mortalidad en embarazadas, siendo la segunda causa de muerte materna en países desarrollados. Por ello, la importancia de contar con un programa de cribado efectivo que permita identificar a tiempo a aquellas mujeres en riesgo de desarrollar esta condición.

El Gobierno Vasco enfatiza que Euskadi es pionera en la implementación de este tipo de cribado, ofreciéndolo de forma equitativa y accesible a todas las embarazadas. Con la realización de pruebas y evaluaciones durante el control del primer trimestre, se podrá determinar el riesgo individual de cada mujer y tomar las medidas preventivas necesarias.

En caso de identificar un riesgo alto, se recomendará el uso de una baja dosis de aspirina durante determinadas semanas del embarazo como medida preventiva. Este tratamiento es seguro tanto para la madre como para el bebé, y se ha demostrado altamente efectivo en la prevención de formas tempranas de preeclampsia.

Este novedoso programa ha sido desarrollado y pilotado por instituciones de prestigio como el Hospital Universitario Cruces de Osakidetza y el Instituto de Investigación Sanitaria Biobizkaia, con la participación de diversas organizaciones sanitarias. El trabajo constante del equipo de investigación ha permitido mejorar continuamente el programa de cribado, incorporando nuevos indicadores para garantizar una mejor salud para las mujeres embarazadas.