El Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha manifestado su desaprobación por el homenaje realizado por Sortu a cuatro miembros de ETA que fallecieron en un atentado en el año 2000 en el barrio de Bolueta en Bilbao. Urkullu considera que es "deplorable" este acto y además ha declarado que las víctimas que fueron causadas intencionalmente como parte de una estrategia inmoral no pueden volver a ser consideradas víctimas.
La Fundación Fernando Buesa ha denunciado la actitud "indigna e inaceptable" de Sortu al apoyar y ensalzar la trayectoria de aquellos que decidieron cometer asesinatos, refiriéndose a Patxi Rementería, Ekain Ruiz Ibarguren, Zigor Aranbarri y Urko Gerrikagoitia. Han calificado esta actitud como una legitimación del terrorismo.
Urkullu también ha utilizado las redes sociales para referirse a estos hechos y ha afirmado que la convivencia no implica homenajear a personas que llevaban una bomba en su coche, incluso si perdieron la vida a causa de sus propios explosivos.
Además, el Lehendakari ha destacado que la convivencia se practica sin condiciones y ha agregado que las víctimas que fueron causadas premeditadamente como parte de una estrategia inmoral no pueden volver a sentirse víctimas. Por lo tanto, ha señalado que algunas personas aún tienen un largo camino ético por recorrer.
Por último, Urkullu ha querido recordar especialmente a Joxe Mari Korta, presidente de la asociación de empresarios guipuzcoanos (Adegi), asesinado por ETA hace 23 años. ETA puso fin a su vida con un artefacto explosivo en Zumaria (Gipuzkoa) el 8 de agosto de 2000.