En un sentido llamado a la unidad y la soberanía, Arnaldo Otegi, líder de EH Bildu, instó a todos los vascos a unirse en la construcción de lo que él describe como una "república vasca de iguales". Durante un evento celebrado en Pamplona, que marcó el cierre de una significativa manifestación por el Aberri Eguna, Otegi reafirmó su compromiso con la lucha del pueblo vasco por su autodeterminación.

Otegi se dirigió a los presentes enfatizando que la jornada no debería ser utilizada para criticar a quienes defienden la identidad nacional del País Vasco. "Dejamos eso a aquellos que convierten el debate político en insultos y descalificaciones", declaró, subrayando la importancia del respeto en el diálogo político.

En su discurso, Otegi hizo hincapié en la necesidad de estar preparados para enfrentar tanto los desafíos actuales como los que vendrán en el futuro. Hizo un llamado a todos los que creen en un país con más reconocimiento nacional y en el fortalecimiento de su lengua y cultura.

El secretario general de EH Bildu manifestó que, ante los ataques verbales, es fundamental seguir tendiendo la mano para establecer un diálogo constructivo. Abogó por una estrategia a largo plazo en lugar de soluciones inmediatas, recordando que la visión compartida de una república vasca de iguales es el horizonte que se debe alcanzar.

Otegi también reflexionó sobre la rica historia del País Vasco, resaltando que su futuro ha sido forjado por el esfuerzo de generaciones de trabajadores. "Construir una patria implica defender los derechos de las grandes mayorías", afirmó con firmeza.

Dirigiéndose a la juventud, Otegi expresó su gratitud y esperanza, alentando a las nuevas generaciones a continuar con la lucha por la soberanía nacional y por un futuro inclusivo y diferente. "Nos llena de orgullo ver cómo se suman al compromiso de construir un mejor País Vasco", agregó con optimismo.

Reconociendo que no siempre se han aprovechado las oportunidades en el pasado, Otegi enfatizó que es crucial aprender de estas experiencias y actuar con inteligencia, tanto emocional como política, para avanzar hacia la libertad y soberanía que anhelan.

En un momento de memoria histórica, Otegi recordó la conmemoración de los 50 años de la muerte del dictador Franco y la ejecución de militantes antifascistas. Rememoró los días de huelga general que movilizaron a la ciudadanía en respuesta a las condenas a muerte, destacando el eco global que generó aquel momento de resistencia.

Finalmente, Otegi reafirmó su determinación y la de su partido: "Nadie podrá detener la primavera que se avecina, nadie podrá impedir que recordemos y honremos a quienes dieron sus vidas por esta causa". Con su mensaje, cerró el acto junto a los asistentes, quienes unieron sus voces para cantar el "Eusko gudariak", reafirmando su compromiso con la lucha por una república vasca de iguales.