En un bar ubicado en Erandio (Bizkaia), dos hombres de 24 y 37 años de edad han sido detenidos después de una intervención policial en el mismo, dedicado principalmente al tráfico de drogas, siguiendo todas las pistas de la investigación que determinó que la mayoría de la clientela accedía al local para comprar drogas, principalmente cocaína y hachís, permaneciendo muy poco tiempo en su interior.
El Departamento de Seguridad ha declarado que estas detenciones son resultado de tareas preventivas realizadas por la Ertzaintza contra la venta y el consumo de drogas, focalizadas en el bar situado en la plaza Astrabudua, Erandio.
Las investigaciones policiales comenzaron el pasado mes de abril y se constató que el establecimiento era atendido por dos individuos, uno de los cuales actuaba como camarero y el otro permanecía en una dependencia interna, sin apenas salir.
Se observó que la mayoría de las personas que lograban entrar al bar, uno de los cuales se encuentra cerca de un centro educativo, lo abandonaban en unos pocos minutos. Incluso algunos se acercaban en automóvil, estacionándolo de manera incorrecta en las inmediaciones durante poco tiempo.
En la tarde del miércoles 17 de mayo se inició el dispositivo policial, y se comprobó que varias personas que habían entrado al bar, tras ser interceptados al salir en la vía pública, portaban diversas cantidades de hachís y cocaína, compradas en el local al camarero.
Los oficiales ingresaron al bar después de revisar las evidencias y el hombre que atendía la barra comenzó a gritar. Desde allí se accedía a la cocina, donde había una puerta cerrada por dentro de entrada a otra habitación, que tenía practicado un agujero a modo de ventanilla.
En el interior se encontraba un segundo hombre que no atendió las indicaciones de apertura de la puerta. Tras forzarla, los agentes policiales observaron que dicho individuo estaba en el baño y había activado la descarga de agua del inodoro. Dentro, se halló una báscula de precisión, habiendo podido arrojar también diversas drogas por las tuberías.
Posteriormente, y con la ayuda de la Unidad Canina de la Ertzaintza, se localizaron más de mil euros, distribuidos en billetes de diferente cuantía entre las páginas de un libro localizado sobre una balda. Además, a los dos implicados, que fueron detenidos por un delito de tráfico de drogas, les fue incautado más dinero que llevaban entre sus pertenencias.
En el bar había dos clientes, uno de los cuales reconoció que había consumido ya la cocaína comprada al camarero y el otro estaba esperando que le entregaran el hachís que ya había pagado.
Basándose en la revisión del establecimiento, la Ertzaintza considera que el camarero atendía y distribuía las drogas entre los clientes, que le eran entregados por el otro detenido a través de la ventanilla habilitada en la puerta, que disponía de una cerradura y un cerrojo. Otra segunda puerta de entrada a esta dependencia, también estaba cerrada con llave y atrancada con una máquina de gimnasio de un peso elevado.
El bar presentaba una situación de falta de higiene y acumulación de cubos de basura sin vaciar, evidenciando la dedicación del local a la presunta venta de drogas. El año pasado, en junio, la Ertzaintza realizó una operación antidrogas en el mismo establecimiento con el resultado de otros dos arrestados en circunstancias similares.
Una vez concluidas las investigaciones policiales, el bar fue cerrado. Además, se coordinó con el Ayuntamiento de Erandio para realizar una inspección sanitaria en el local. Los dos detenidos serán presentados ante la autoridad judicial.