En un reciente giro político, el Lehendakari Imanol Pradales ha expresado su profundo descontento ante la decisión del Tribunal Supremo que ha revocado la transferencia de competencias sobre la homologación de títulos universitarios extranjeros al Gobierno Vasco. Pradales ha calificado esta decisión de "muy grave", alertando sobre la necesidad de establecer mecanismos que protejan los acuerdos bilaterales previamente alcanzados entre el Gobierno vasco y el central.

Durante una rueda de prensa celebrada en Pamplona, tras su participación en la Asamblea General de la Eurorregión, Pradales abordó esta sentencia y su implicación al considerar que esta representa un ataque sin precedentes a las competencias que ya habían sido otorgadas al Gobierno Vasco. Afirmó que esta es la primera vez en la historia de su autogobierno que un fallo judicial socava un acuerdo político ya establecido.

El Lehendakari enfatizó que este acto judicial equivale a un incumplimiento de un acuerdo que fue formalizado hace cerca de un año entre ambas administraciones. La gravedad de esta situación radica en su carácter innovador y preocupante, ya que pone en entredicho la legitimidad de futuros acuerdos.

En comparación, Pradales recordó un caso anterior en Navarra relacionado con la competencia de tráfico, que afortunadamente fue validado en Madrid. Sin embargo, el actual fallo del Tribunal Supremo ha abierto una "veda" que coloca en peligro los acuerdos alcanzados entre los Gobiernos español y vasco, al permitir que la judicatura intervenga en cuestiones ya refrendadas políticamente.

El Lehendakari subrayó la necesidad urgente de encontrar una solución que impida que situaciones similares se repitan. Manifestó que están trabajando en conjunto con el Gobierno español para desarrollar un sistema que asegure que las competencias acordadas no sean vulneradas nuevamente por decisiones del Tribunal Supremo, un tribunal que, según él, no es el indicado para dirimir estas cuestiones.

Además, Imanol Pradales destacó la repercusión inmediata de esta decisión en numerosas personas que buscan homologar sus títulos para acceder al competitivo mercado laboral del País Vasco en sectores como la medicina, la ingeniería y la biotecnología. Resaltó la crítica situación que atraviesan estos profesionales, quienes se ven impedidos de trabajar en un contexto donde la demanda de talento cualificado es alta.