En un esfuerzo conjunto por ayudar a las comunidades afectadas, integrantes de las Fuerzas Armadas se han desplegado en diversas localidades de la Comunidad Valenciana. Militares de Mungia, en Bizkaia, han unido sus fuerzas con sus colegas de Córdoba, todos pertenecientes a la Brigada Guzmán el Bueno X, para asumir el relevo de sus compañeros que han estado trabajando en la zona durante diez días tras la devastación provocada por la DANA.

El Ministerio de Defensa ha comunicado que los militares que ahora abandonan la región han llevado a cabo un exhaustivo trabajo de limpieza y rehabilitación. Estos valientes hombres y mujeres han estado a cargo del acondicionamiento de calles y caminos, así como de la extracción de agua de viviendas, sótanos y garajes. El desafío ha sido monumental, enfrentándose a la ardua tarea de retirar barro, enseres, automóviles y otros escombros arrastrados por las inundaciones, especialmente en las localidades de Massanassa, Paiporta y Loreguilla.

Además de estas labores esenciales, el grupo de militares también ha transformado el campo de fútbol de Alfalfar en un vertedero provisional, donde se acumulan los restos derivados de la limpieza. Entre sus misiones, han realizado búsquedas en ramblas como el Barranco del Poyo, así como en campos de cultivo y riberas en Gestalpar, con la esperanza de encontrar a personas desaparecidas que podrían estar aún en la zona.

La Brigada Guzmán el Bueno X también ha desempeñado un papel crucial en la distribución de alimentos y artículos de primera necesidad, atendiendo las demandas de las comunidades más afectadas. En lugares como Sedaví, sus tareas han incluido la inspección de aparcamientos subterráneos para retirar vehículos dañados y llevar a cabo labores de desatasco en la red de alcantarillado, todo ello en prevención de futuras lluvias que podrían agravar la situación.

La dedicación de estos militares ha sido inconmensurable, trabajando en turnos de 12 horas, día y noche, "a destajo y sin escatimar esfuerzos", como ha destacado el comunicado de Defensa. Su labor ha sido coordinada en estrecha colaboración con ciudadanos locales, voluntarios de diferentes lugares, así como con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y los servicios de Bomberos, creando un verdadero frente común para ayudar a los damnificados.

Por su parte, los efectivos de la Brigada Guzmán el Bueno X que permanecen en el acuartelamiento de Soyeche, en Mungia, y en la Base de Cerro Muriano de Córdoba, continúan apoyando a sus compañeros desplegados, asegurándose de que cuenten con todos los recursos necesarios para llevar a cabo su importante labor. También están preparando la llegada de nuevos contingentes para seguir adelante con los esfuerzos de recuperación, asegurando que se mantenga la respuesta ante esta crisis humanitaria.