La empresa Tubos Reunidos Group ha comunicado al comité de empresa de la planta de Amurrio (Álava) su intención de presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para la práctica totalidad de la plantilla. La duración del ERTE está planteada inicialmente para seis meses, a partir del 1 de septiembre, con el objetivo de hacer frente a la reducción en la entrada de pedidos que se ha venido evidenciando en los últimos meses.

La próxima semana se constituirá la mesa de negociación para discutir los términos y condiciones de este ERTE, que propone una reducción del 50% en la jornada laboral. Esta medida temporal de ajuste de producción se plantea con el fin de obtener la flexibilidad necesaria para afrontar la disminución en la demanda de productos.

El presidente ejecutivo de Tubos Reunidos, Francisco Irazusta, informó la semana pasada que la entrada de pedidos ha disminuido de manera significativa en los últimos meses, lo que tendrá un impacto importante en los resultados del segundo semestre del grupo. Según los responsables de la empresa, esta reducción en los pedidos se debe al alto stock de tubos entre los distribuidores y al aumento de los tipos de interés, que ha generado retrasos en los proyectos.

En particular, la planta de Amurrio, que cuenta con una plantilla de 800 personas, se verá directamente afectada por esta disminución en los pedidos, que se prevé que continúe en la segunda mitad del año. Por lo tanto, se plantea el ERTE como una medida coyuntural de prevención para garantizar la sostenibilidad de la compañía.

El ERTE se propone para la práctica totalidad de la plantilla durante un período de seis meses a partir del 1 de septiembre, con una reducción del 50% en la plantilla. Sin embargo, se ha comunicado que no creen que sea necesario aplicar el expediente en su totalidad, lo cual dependerá de la evolución de la demanda en los próximos meses.