Un sorprendente hallazgo tuvo lugar en el aeropuerto de Bilbao, donde agentes de la Guardia Civil y del Servicio de Vigilancia Aduanera se encontraron con más de 25.000 euros escondidos en el equipaje de un pasajero. La operación, que se llevó a cabo el 25 de julio, reveló un curioso total de 3.900 monedas de un euro, detectadas por los agentes a través de rayos X.

El Ministerio del Interior ha subrayado el papel crucial de las fuerzas de seguridad en la vigilancia de las divisas que entran y salen del país. Diariamente, estos efectivos realizan exhaustivos controles en la zona de salidas del aeropuerto de Loiu, desnudando las estrategias de quienes intentan eludir las normativas fiscales.

En esta ocasión, la atención se centró en dos maletas que, tras el escaneo, parecían contener grandes cantidades de monedas. Es así que, al identificar al propietario, un ciudadano estadounidense que se dirigía a Frankfurt, los agentes decidieron inspeccionar su carga.

El resultado fue impactante: encontraron un total de 3.982,98 euros en monedas de un euro dentro de las maletas. Además, el equipaje de mano del pasajero ocultaba 21.270 euros en billetes y 1.736,05 francos suizos, que equivale a unos 1.860,09 euros, distribuidos entre varios portafolios y carteras.

El total de dinero incautado superó los 25.000 euros, cifra que obligaba al viajero a presentar una declaración de movimiento de medios de pago, procedimiento que no cumplió. De acuerdo con la normativa, se retuvieron 24.252,98 euros y los francos suizos, mientras que se dejó al pasajero con 1.000 euros para sus gastos básicos.

El importe confiscado fue trasladado a una cuenta del Banco de España, conforme a los protocolos establecidos para estos casos. Asimismo, se ha abierto un expediente de denuncia que será enviado a la Secretaría de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias.

Las autoridades han recordado que cualquier ciudadano que transporte 10.000 euros o más, o su equivalente en otras divisas, debe hacer la pertinente declaración a la llegada o salida del país. Esta obligación no solo evita sanciones, sino que también fortalece la seguridad financiera colectiva. La Guardia Civil hace un llamado a la colaboración ciudadana, instando a reportar cualquier actividad sospechosa a través del número 062 o mediante la aplicación AlertCops.