En un reciente debate en las Juntas Generales de Bizkaia, EH Bildu cuestionó la continuidad de la gestión de la planta de tratamiento mecánico biológico (TMB) tras la apertura de un procedimiento sancionador por parte de la Inspección de Trabajo. La cuestión se centra en la intoxicación de un operario que ocurrió durante labores de limpieza en la instalación ubicada en el monte Arraiz.

La diputada de Medio Natural y Agricultura, Arantza Atutxa, defendió que no se abrirá un expediente a la UTE TMB Arraiz, argumentando que se han implementado medidas de seguridad "suficientes" desde el incidente para prevenir futuras eventualidades. Este pronunciamiento llega en un momento en que la seguridad en el trabajo es un tema candente en el sector.

Atutxa ofreció un resumen detallado de los eventos, comenzando con el momento en que un trabajador presentó síntomas tras realizar tareas de limpieza en un túnel con una retroexcavadora. Se confirmó que el accidente fue calificado como "leve" y sin baja, aunque la atención médica reveló altos niveles de monóxido de carbono en su sistema, lo que obligó a su traslado a un centro hospitalario.

La situación ha sido denunciada por EH Bildu, que señala que la Inspección de Trabajo ha iniciado procedimientos contra la empresa por poner en riesgo la salud de los empleados al exigir labores que no estaban incluidas en sus funciones, careciendo de protocolos adecuados para gestionar esos riesgos laborales.

Raúl Méndez, portavoz de EH Bildu, subrayó que las limpiezas se realizaron sin los equipamientos necesarios para medir la presencia de gases, lo que contribuyó al incidente. Tras la investigación, la Inspección tomó medidas el 21 de marzo al abrir un procedimiento sancionador contra la UTE.

En su intervención, Atutxa reconoció que, aunque se espera un alto nivel de protocolarización, siempre pueden surgir imprevistos, por lo que la labor de las comisiones de seguridad es vital. Lamentó profundamente el incidente e insistió en que la empresa debería haber tomado las precauciones adecuadas previamente.

Respecto a las acciones correctivas, la diputada anunció la implementación de un nuevo protocolo, ya aprobado y en consonancia con las sugerencias de la Inspección de Trabajo. Este protocolo contempla medir la calidad del aire antes de que cualquier trabajador entre al túnel, además de reforzar la vigilancia de la salud con la colaboración de una empresa externa.

En términos de inversión, Atutxa aseguró que los esfuerzos por mejorar la planta continúan en marcha. Desde el año pasado, se han destinado 6,8 millones de euros en el plan de mejora de la TMB, con una porción significativa dedicada a la modernización de la maquinaria y la mejora de las condiciones de seguridad.