El presidente del EBB del PNV, Aitor Esteban, ha compartido sus reflexiones sobre la reciente huelga general en Euskadi convocada por los sindicatos con el propósito de expresar solidaridad con el pueblo palestino. En una declaración realizada este jueves, Esteban sugirió que, aunque la movilización ciudadana es motivo de orgullo, no espera que esto altere la actual situación política en la región.

Durante una entrevista con Euskadi Irratia, el líder del PNV destacó la creciente empatía que existe en la sociedad vasca hacia los palestinos, subrayando la gravedad de la situación en Gaza y condenando las acciones de Israel, las cuales, según él, han sobrepasado todos los límites aceptables.

Esteban remarcó que, a pesar de la importancia de alzar la voz en pro de la paz, no considera que la huelga tenga el poder de provocar un cambio inmediato en las dinámicas políticas en la región. "Es esencial abogar por la paz, pero es poco probable que una huelga genere un impacto significativo", enfatizó.

El presidente del PNV también se refirió a las críticas de ELA, que organizó una sentada frente a la sede del partido en Bilbao, sugiriendo que hay quienes intentan monopolizar ciertas causas. "Es curioso que algunos piensen que ciertas luchas son exclusivamente suyas", comentó, haciendo eco de su oposición a las acciones de Israel que expresó en el Congreso hace casi dos años.

Aitor Esteban defendió la postura del PNV, reiterando su condena a la violencia y sus esfuerzos por abordar la situación de manera clara. Sin embargo, lamentó que, a menudo, las críticas se dirijan exclusivamente a su partido, como se evidenció en la controversia sobre una bandera de Palestina en Azpeitia, que fue retirada por algunos militantes.

En cuanto a la situación en Palestina, Esteban la describió como "delicada" y apuntó que el camino hacia la solución sigue siendo "complicado". Reconoció que aunque la idea de una solución de dos estados es atractiva, la realidad actual presenta desafíos significativos.

Por último, en respuesta a la solicitud de algunos sectores de romper lazos económicos con Israel, Aitor Esteban planteó que cada empresa debe evaluar su propia situación. "Es fundamental que cada organización determine si puede afrontar las consecuencias de cortar relaciones comerciales, especialmente aquellas implicadas en la industria armamentista", subrayó.

El presidente del PNV enfatizó que no todas las empresas en Euskadi tienen las mismas relaciones con Israel y que cada una debe considerar las implicaciones éticas de sus decisiones comerciales. "Evaluar los vínculos y las responsabilidades morales no es una tarea sencilla, y cada caso debe ser analizado individualmente", concluyó.