En Bilbao, el pasado 11 de diciembre, la portavoz del Gobierno vasco, María Ubarretxena, declaró que las negociaciones presupuestarias con EH Bildu siguen en curso, después de la última reunión que tuvo lugar el martes. Ubarretxena destacó que "siempre hay opciones hasta el último momento" para conseguir un acuerdo satisfactorio.

Durante una rueda de prensa que se llevó a cabo tras el consejo de Gobierno vasco, Ubarretxena confirmó la celebración de una reunión reciente y subrayó que "las conversaciones continúan". Señaló que le habían solicitado mantener la discreción en el proceso y recordó que públicamente, incluso en el Parlamento, se había comprometido a trabajar con este nivel de confidencialidad. "Por lo tanto, las negociaciones siguen adelante y siempre hay opciones hasta el último momento", reiteró con firmeza.

En otro plano, después de que se superara el trámite de las enmiendas de totalidad, el proyecto de presupuestos avanza hacia la siguiente fase, que incluye la discusión este jueves en la Comisión de Hacienda de las enmiendas parciales. Este es un paso previo crucial antes del pleno previsto para el 20 de diciembre, donde se llevará a cabo el debate y la votación final sobre las cuentas del año 2025.

Al ser preguntada sobre cuál es el plazo límite para concluir las negociaciones, Ubarretxea indicó que "queda un día para que empiece el proceso de enmiendas", sugiriendo que el tiempo apremia y la presión por llegar a un consenso es palpable.

En cuanto a las solicitudes del portavoz de EH Bildu, Peio Otxandiano, quien instó al Gobierno Vasco a realizar un "movimiento", Ubarretxea respondió que el ejecutivo "ha estado moviéndose desde el minuto uno" en este proceso. Resaltó que el Gobierno ya ha ajustado su posición y su postura durante las negociaciones.

"El Gobierno de Pradales no necesita apoyos políticos para aprobar los presupuestos", aseguró Ubarretxea. Sin embargo, reforzó la postura de que Euskadi "requiere un acuerdo más amplio", enfatizando la importancia de involucrar diversas voces en la toma de decisiones que afecten al futuro económico de la comunidad.

Desde esta óptica, Ubarretxea insistió en que el Gobierno ha estado receptivo y ha hecho modificaciones a su propuesta inicial, incorporando sugerencias de otros grupos para enriquecer el proceso. De este modo, dejó claro que no considera que "sea el Gobierno al que le toque mover su postura" en este punto del debate.

(Se espera una ampliación de esta información en breve)