En un contexto de creciente preocupación por la discriminación racial en diversas instituciones, la ONG SOS Racismo Gipuzkoa ha hecho un llamado urgente a poner fin a la práctica de controles basados en perfilamiento étnico por parte de la Ertzaintza y las policías locales.

Este pronunciamiento surge tras la reciente condena del Tribunal Europeo de Derechos Humanos a Francia, que criticó abiertamente la implementación de controles racistas en su territorio. La organización ha utilizado este fallo como un ejemplo claro de la necesidad de revisar y modificar prácticas similares en el ámbito local.

SOS Racismo ha señalado con énfasis que las acciones de control, como la solicitud de documentos o registro de personas, se llevan a cabo con frecuencia, fundamentadas en criterios raciales más que en evidencias concretas. Esta dinámica, afirmaron, se está normalizando en el comportamiento policial y es motivo de grave preocupación.

Además, desde la ONG se ha manifestado que las justificaciones presentadas en ocasiones para actuar de esta manera no son más que falacias. “El pretexto de investigar delitos, en muchas ocasiones, no es más que una justificación vacía”, afirmaron, subrayando que tales prácticas son incompatibles con los principios de Derechos Humanos.

Por consiguiente, SOS Racismo ha exigido una vez más la abolición de estas medidas discriminatorias y la implementación de una regulación clara que obligue a los cuerpos policiales a cumplir con estándares de respeto a los derechos fundamentales. Esta demanda no solo es un reclamo, sino una exigencia de responsabilidad por parte de las autoridades competentes.